Un año decisivo para Stroll
Por Mauro García Forti
El 2023 está siendo un cara y cruz para los pilotos de Aston Martin, mientras Alonso no para de acumular podios y grandes resultados siendo el mejor piloto del resto sin contar a los Red Bull, el año de Lance Stroll está siendo una pesadilla.
El canadiense no empezó nada mal, haciendo buenos resultados a pesar de sus muñecas lesionadas. Pero desde hace unas cuantas carreras, el nivel de Lance no ha hecho otra cosa que bajar.
A principios del año ya veíamos cómo el canadiense estaba por detrás de su compañero en clasificación y en carrera, pero en las últimas citas, la diferencia de varias décimas con el bicampeón mundial no hace otra cosa que aumentar.
En Mónaco mientras Alonso luchaba por la pole position separado por milésimas con Verstappen, Stroll clasificó decimoctavo y el domingo tuvo una de las carreras más flojas de su trayectoria, en la que no paró de chocarse contra los muros.
Su puesto en el equipo está indiscutido al ser el hijo del dueño, pero debe demostrar que es un piloto con siete temporadas en la máxima categoría y que fue capaz de plantarle cara a un campeón del mundo como es Sebastian Vettel.
Aston Martin confía a que él en el futuro ocupe el rol de líder en el equipo, pero ahora mismo Lance no está mostrando ni el nivel ni la personalidad para liderar una escudería que da pasos positivos para algún día ser un contendiente sólido al campeonato mundial.
Todavía está a tiempo en este Gran Premio de España de hacer una gran actuación, ya que el monoplaza verde cuenta con un gran ritmo durante este fin de semana, pero este cambio de actitud no puede esperar, o reacciona o siempre será considerado como un piloto que está en la Fórmula 1 por el dinero de su padre más que por un talento que ha demostrado varias veces que lo tiene.