EL GRAN RESETEO VINOTINTO

Por Richard Méndez

Una de las semanas más convulsionadas de la historia de la Vinotinto fue la que acabamos de vivir enmarcados en el interminable bucle de escándalos en que ha permanecido el fútbol venezolano desde que tengo uso de razón. Ocho días bastaron para pasar de los rumores a las acusaciones que llevaron a las renuncias y a los quiebres en el comando técnico de la Selección finalizando este viernes con el nombramiento de un nuevo seleccionador nacional. Atrás quedó el prestigio enlodado de Pékerman por las acusaciones en contra de Pascual Lezcano, quien es su representante y a la vez fue manager de todas las selecciones nacionales.

Desde el comienzo Pékerman fue dando señales de no estar a gusto y tampoco de estar comprometido con su empleo durante su breve paso de poco más de un año caracterizado por el marcado distanciamiento de la opinión pública y hasta muestra de falta de ganas para el trabajo. Su equipo se fue desmoronando y apartando como sucedió con el jefe de scouting que ejerció Damián Brizuela marchándose al fútbol boliviano. También se bajaría más tarde Daniel Ayude llegando a la Liga MX a trabajar con Larcamón. 

Una auditoría fue el detonante para encontrarle "cables pelados" a la gestión de Pascual Lezcano a lo que se sumaron varias denuncias y se terminó de romper el grupo que había armado Pékerman. La salida de Néstor y Pascual no encontraron demasiado eco y de los rostros visibles Coloccini que había fracasado con la Sub 20 en el Suramericano se le terminaba su corta primera experiencia como entrenador a donde llegó con intención de aprender y no para enseñar.

La gran oportunidad quedó para el "Bocha" Fernando batista que llegó a Venezuela de la mano de Pékerman y Lezcano, pero que no se sumó a su mentor. Esta es un oportunidad valiosa que podrá impulsar su carrera de técnico que venía estando enjaulada en categorías menores sin dar ese salto definitivo a algo mayor. Su momento ha llegado y no es para darle continuidad a lo poco que tenía en mente su antecesor. La idea, el proyecto es exclusivamente suyo y es él quien debe asumir de este modo el nuevo reto.

Muchos dirán que no importa que su experiencia sea solo en categorías inferiores porque basta con ver a Lionel Scaloni ganando el Mundial dirigiendo a Argentina sin experiencias previas. Lo que pocos te dicen es que en el caso del campeón mundial tiene entre sus dirigidos a Messi, Enzo Fernandez, Di Maria y una amplia cantidad de jugadores que hacen su actividad diaria en las principales ligas de Europa y eso no lo tiene Venezuela. La falta de experiencia a ese nivel no es determinante para lo que han de ser sus resultados con el once nacional, esos hay que trabajarlos y prepararlos y es el reto del proyecto del Bocha.

Batista deberá encontrar la forma de ampliar el universo de jugadores convocables para fomentar competencia interna y llevar a cabo un rejuvenecimiento de la Selección como en el pasado hicieron los técnicos venezolanos. También le ayudará mucho romper con ese odioso proceder que tuvo la era Pékerman en la que cual deidad todos sabían que existía pero era inalcanzable para la mayoría. 

Que la FVF, los fanáticos y medios comprendan que no se puede idolatrar procesos ni cancelar el que hace una crítica cuando las cosas van mal. Que no se puede tratar como un acontecimiento extraordinario que se vea al entrenador de la Vinotinto viendo un partido en el estadio. Que no se aplauda la ausencia de información de una convocatoria ni se acuse a los periodistas de "no dejar trabajar" al técnico por buscar la noticia. Que este reseteo venga para todos y que de una buena vez entendamos que no está mal cuestionarse las cosas que tenemos enfrente porque solo así podemos mejorarlas elevando la exigencia.

Foto: Prensa FVF