VERSTAPPEN, EN OTRA GALAXIA
Por Mauro García Forti
Se acabaron las vacaciones y la Fórmula 1 regresó al mítico Spa-Francorchamps como primera parada para afrontar las últimas nueve carreras de este campeonato mundial.
Caracterizado por un recorrido largo y con muchas oportunidades para adelantar, el circuito belga suele ser un lugar en el que los equipos deciden cambiar el motor por uno nuevo para afrontar la temporada con más unidades de potencia para llegar hasta el final en Abu Dabi, por lo tanto, en esta carrera saldrían desde los ultimos puestos.
Sin embargo, la sorpresa llegaría cuando siete pilotos cambiarían el motor y entre ellos estarían Max Verstappen y Charles Leclerc, por lo que veríamos como dos pilotos que suelen salir en los primeros puestos tendrían que remontar desde las últimas posiciones.
La clasificación por lo tanto sería una muestra de trabajo en equipo de algunas escuderías, que buscaban que el piloto que no penalizase por cambiar la unidad de potencia saliese lo más adelante posible.
A pesar de todo, Verstappen fue el más rápido de todos, sacándole más de medio segundo al Ferrari de Sainz y demostrando que al día siguiente, a pesar de salir desde atrás, era un firme candidato a llevarse la victoria.
Al ordenarse las posiciones, veríamos que el holandés y Leclerc saldrían juntos en la decimoquinta y decimosexta posición respectivamente, tomando Sainz la pole position, con Sergio “Checo” Pérez segundo y Fernando Alonso tercero, siendo esto un hecho insólito al tener a los tres pilotos hispanohablantes en las tres primeras posiciones en la salida.
Con un sol radiante y temperaturas altas, el domingo se convertía en un día perfecto para la carrera y, no decepcionó, dándonos unos primeros metros de infarto con Sainz partiendo bien y escapándose ligeramente de sus perseguidores.
Alonso había salido bien y pasaba a Pérez en la primera curva y se lanzaba a perseguir a su compatriota. Sin embargo, Hamilton también pasaba al mexicano y perseguía al asturiano.
Los dos viejos rivales batallarían en la larga recta de Kemmel y cuando llegaron a la chicane, Hamilton se equivocó, estrangulando demasiado al Alpine y provocando un contacto en el que la radio del español echaría humo y en el que el Mercedes del británico dijo basta y tuvo que retirarse.
Por detrás, Verstappen había comenzado su remontada a un ritmo demoledor con Leclerc justo detrás. El monegasco poco después haría su primera parada debido a que tenía un tear off (lámina de plástico que llevan los pilotos en el visor del casco que se puede retirar cuando se ensucia) metido en los conductos de freno y debería volver a empezar su remontada.
El ritmo del Red Bull era estratosférico y Max ganaba posiciones rápidamente, Sainz empujaba al límite su Ferrari para ganar distancia, pero todo fue inútil, en la vuelta 12 de carrera el neerlandés lideraba la prueba luego de haber salido decimotercero por la decisión del equipo AlphaTauri de que sus dos monoplazas saliesen desde el pit-lane.
Dominando a placer la carrera y metiéndole 17 segundos a su compañero de equipo y 26 segundos a Sainz, Verstappen cruzaba la línea de meta por última vez en este Gran Premio de Bélgica derrapando, demostrando que en este momento no hay nadie que le pueda impedir conseguir su segundo campeonato mundial y que Red Bull está en otro escalón al lograr su cuarto doblete del año.
Ferrari nuevamente se resignó a lograr el último lugar del podio con Sainz luego de costarle algunos puntos a Leclerc tras arriesgar hacer una última parada en boxes para lograr la vuelta rápida. El monegasco excedió el límite de velocidad en la calle de boxes y fue sancionado con cinco segundos, lo que le haría perder una posición con Alonso y terminar siendo sexto.
Definitivamente, la pregunta que ronda a los periodistas y aficionados ya no es qué piloto se llevará el campeonato, sino en qué carrera se convertirá el holandés en bicampeón mundial.
Para mayor alegría de Max y de su “Ejército Naranja”, el Gran Premio de los Países Bajos nos espera este fin de semana, donde se espera que las condiciones del Circuito de Zandvoort ayuden a que no sea un paseo de los monoplazas de la escudería austriaca.