ESTA VINOTINTO ENAMORA
Por Richard Méndez
La Vinotinto Femenina ha encontrado aquel camino que hace unos años nos había ilusionado con el grupo que se titularon campeonas en el Metropolitano de Cabudare hace unos años y que fueron la base de las chicas Sub 17 en la Copa del Mundo. Hoy arrancaron con triunfo sobre las uruguayas y ya parten como favoritas para enfrentar a Perú en la Copa América que reparte cupos al Mundial. Ellas vienen de un proceso complejo en el que al igual que todas las versiones de la Vinotinto se vieron afectadas por la incertidumbre e inestabilidad de la Federación Venezolana de Fútbol que incluyó fallecimiento de un presidente que había sido detenido por las autoridades y hasta de la penosa pero necesaria Comisión Normalizadora de FIFA para llevar adelante el disputado y polémico proceso electoral de la FVF.
En el pasado se tuvo éxito bajo la dirección del panameño Keneth Zseremeta quién después fue acusado de acoso físico, psicológico y sexual por parte de las jugadores que tuvo bajo su responsabilidad. Llegó la italiana Pamela Conti y le tocó reconstruir un grupo que había quedado desorientado y con pocas ganas de juntarse a menos que las cosas cambiaran. Pamela mostró el liderazgo necesario para levantar y juntar al grupo, logró generar competencia en cada lugar de la cancha y amplitud de jugadoras para tener ahora la capacidad de rotar y no depender de un grupo reducido de atletas. Conti fue paciente y encontró el apoyo después de la tormenta y entonces pudo trabajar con una base que ya venía llena de éxitos del pasado, añadiendo algunos elementos formados lejos del país como la diáspora venezolana que hace vida en otras latitudes. Algunas con apellidos poco usuales para el venezolano como Sonia O'Neill, Mariana Speckmaier, Bárbara Olivieri y otras se unieron a las Deyna Castellanos, Oriana Altuve y un gran grupo que entendió la necesidad histórica de dar satisfacciones al fanático venezolano.
Es cierto que las distancias con Brasil en la categoría femenina se mantiene muy parecida a lo que ocurre en el masculino, las distancias con chicas del resto de Sudamérica no son tan grandes y ante la mayoría de los rivales las venezolanas tienen mayor ventaja por talento, por eso no es comparable con los resultados del plantel masculino y hay que mantener a cada uno en lo que se corresponde.
Hoy todos venezolanos vuelven a sentir ese mismo orgullo de hace unos años atrás, estas chicas han logrado que se nos infle el pecho ganando el cariño y reconocimiento de todos más allá de las notas de prensa, hoy tienen la cobertura mediática que se han ganado en la cancha sin ser una cuota asignada por los justos reclamos de igualdad, ellas han ido más allá y lo han alcanzado con sacrificio. Ellas enamoran a un país entero con su fútbol, hacen que nos pongamos de pie para aplaudirlas y con los ojos aguados de alegría y la piel erizada de sentirnos orgullosos de lo que somos nos llevan de nuevo a la esperanza. Es imposible saber si lograrán clasificar al Mundial y llegar al cuadro final de Copa América, pero debemos desde ya darles gracias por recuperar la sonrisa en el fanático venezolano. Gracias chicas por enamorarnos con su fútbol.
