Nike crece en circularidad con “Re-Creation”, su último programa piloto
Por Jaime Martínez
Sumándose a los continuos esfuerzos, proyectos e iniciativas que desde la multinacional estadounidense Nike, empresa líder del sector de la moda y del equipamiento deportivo, han puesto en marcha a favor de la economía circular, nos encontramos con “Nike Re-Creation”. Un último programa piloto a través del cual la multinacional deportiva está tratando de llevar el “upcycling”, o reciclaje creativo, a una producción realizada en proximidad sobre la base de prendas usadas y de piezas sobrantes de sus inventarios de anteriores colecciones.
Dentro del contexto de esas diferentes medidas con las que desde Nike vienen trabajando con el objetivo último de alcanzar un futuro, por ahora utópico pero cada vez más real, sin emisiones de carbono ni proliferación de residuos basado en una economía plenamente circular, “Nike Re-Creation” viene así a sumarse a iniciativas anteriores ya puestas en marcha por la multinacional deportiva. Destacándose a este respecto desde el proyecto Nike Grind, impulsado en 1992 y con el que desde entonces se viene fabricando, a partir de zapatillas recicladas y de materiales sobrantes, una suerte de caucho con aplicaciones en ámbitos que van del diseño de nuevas zapatillas a la construcción de pistas de atletismo o parques infantiles; el Nike Recycling&Donation, mediante el que, a través de una serie de puntos especializados, la compañía valora cuáles de las prendas de segunda mano que le hacen llegar son aptas para ser recicladas o donadas; o la iniciativa Nike Refurbished. Programa sobre el que comenzaban a experimentar desde Nike a comienzos del pasado 2021, tal y como adelantábamos entonces desde FashionUnited, y con el que la compañía deportiva no solamente se abría al pujante negocio de la segunda mano, sino a reinventarlo, mediante un programa piloto con el que viene a alargar la vida útil de sus zapatillas, ya sean estos artículos fruto de una donación como de una devolución, incluso después de ser usadas.
Siguiendo así pues por esta apuesta por la circularidad y por la experimentación de nuevos modelos comerciales y de producción que beban de su mismo espíritu, es como nos encontramos con esta nueva iniciativa piloto “Nike Re-Creation”. Un programa que, en palabras de John Hoke, director de diseño de Nike, “se destaca como un momento emocionante de experimentación y de progreso”. De este modo, “la iniciativa ejemplifica el espíritu de colaboración de Nike, reuniendo” en torno a ella “a expertos de diseño, de la venta minorista, de la cadena de suministros y en sostenibilidad, para crear estrategias y aprender” nuevas maneras con las que dar alas a este nuevo modelo de economía circular.
Un programa circular de “upcycling” en proximidad
Apostando nuevamente por esa nueva visión que guardan desde Nike de reimaginar los excedentes, los desperdicios y los desechos como recursos que pueden servir de base para la creación de nuevos productos de mayor valor añadido para la compañía, y todo a través de sus propios materiales y productos, “Nike Re-Creation” apuesta por el “upcycling” en proximidad. Un principio con el que han diseñado un nuevo programa piloto, en virtud del cual desde Nike se están encargando de transformar una serie de prendas usadas y de sobrantes de sus inventarios, en nuevas piezas únicas y exclusivas.
Sirviéndose de estos elementos como materia prima, a través de Nike Re-Creation la multinacional deportiva no solamente está apostando por dar una nueva vida a una serie de prendas usadas y/o muertas procedentes de sus inventarios, sino que gracias a sus procesos están logrando elevarlas a todas ellas a la condición de prácticamente de obras de arte, debido a sus singularidades como piezas exclusivas tras haber sido sometidas a la previa fase de reciclaje creativo. Una suma de procesos en los que encontraríamos desde las etapas previas de recolección y selección, hasta la última de reciclaje creativo, que bien señalábamos se están dando en proximidad reforzando así la naturaleza circular y sostenible de esta experiencia piloto, cuya primera fase arrancaba el pasado 26 de mayo desde la tienda Nike de The Grove de Los Ángeles. Flagship store desde la que se presentaban los primeros modelos “upcycling” creados bajo el paraguas de Nike Re-Creation, en lo que se significaba como la oficialización del lanzamiento del programa.
En esta fase inicial, explican desde la multinacional deportiva, Nike Re-Creation “presenta tres siluetas icónicas de sudaderas con y sin capucha”. “Cada silueta está disponible en unas cantidades limitadas, con las piezas individuales de cada una de ellas habiendo sido restauradas hasta una condición para ser usadas, a través de un proceso manual de limpieza, teñido, de costuras de y parches”. Como resultado de eso proceso de acondicionamiento y de “upcycling”, detallan, “cada pieza es única”, presentando detalles tales como parches, así como “costuras decorativas que permiten aumentar su durabilidad, y una variedad de motivos gráficos serigrafiados inspirados tanto en la herencia de Nike como en Los Ángeles”.
Blindando el control sobre sus marcas
Al margen de las singularidades y de las características propias que contempla este nuevo programa piloto puesto en marcha por Nike, realizando un breve análisis sobre el espíritu que respiran todas y cada una de las iniciativas puestas en marcha por la multinacional a favor de la circularidad, parece vislumbrarse un nexo común que apunta al gran interés con el que contaría la compañía deportiva por evolucionar hacia un modelo productivo, cerrado y plenamente circular, en beneficio ya no solamente del medioambiente, sino también de sus propios balances.
En este sentido, los trabajos a favor de esta loable empresa, y a la vista de esta serie de iniciativas, no estarían llegando ni mucho menos ajenos a la polémica, como bien se encargaban de denunciar desde la plataforma especializada StockX. Compañía desde la que acusaban hace escasamente una semana a Nike de tratar de dinamitar el modelo de la reventa, en lo que ahora se presentaría como nada más que la consecuente consecuencia del decidido control que desde Nike estarían dispuestos a aplicar sobre todas y cada una de las etapas por las que podrían llegar a pasar sus piezas y diseños.
Un sometimiento, sobre el que si bien antes se limitaban a realizar su control sobre los canales y las vías para la comercialización de sus productos, dentro de un sistema lineal, los últimos avances por la circularidad les habrían llevado finalmente a ampliar sus horizontes, para ver cómo la recolección de las prendas usadas, su posterior reventa, y las, en su caso, consiguientes fases de rediseño creativo y por último reciclaje, son igualmente etapas que guardan un enorme potencial para la creación de valor, y de ingresos, para la multinacional deportiva. Una Nike que así pues se encontraría decidida a garantizar los derechos y la inviolabilidad de todas sus marcas registradas, en todo cuanto ataña a su posible rentabilización, e incluso en el caso de que esto pueda llegar a significar el tratar de imposibilitar la reventa de sus artículos al margen de los canales oficiales que ya ha puesto en marcha, y de los que se encontrarían en vistas de llegar a poner en práctica.
Unas intenciones con las que desde Nike encerrarían en suma el ánimo de, como resultado, llegar a elevarse, si no como la única, sí como la principal plataforma capaz de rentabilizar y de generar un nuevo valor añadido vinculado a las prendas de segunda mando de las colecciones de sus distintas marcas comerciales. En definitiva, tratando así de blindar el control sobre todas sus marcas, a lo largo del nuevo modelo de economía circular que está implantándose a escala global.
Foto: Nike Re-Creation
Fuente: www.fashionunited.es
