Toni Nadal: «Rafael se puede ir con la cabeza bien alta»
El tío y ex entrenador de Rafa Nadal valoró la figura de su sobrino, que se retiró definitivamente del tenis hace apenas unos días tras la eliminatoria de Copa Davis entre España y Países Bajos.
Toni Nadal elogia a Rafa una vez más tras su retirada
Ya ha pasado una semana desde que Rafael Nadal Parera disputase su último partido como tenista profesional. Una despedida con el amargo sabor de la derrota, tanto a nivel individual, como colectivo (España cedió en los cuartos de final de la Copa Davis), pero con la satisfacción moral de alguien que siempre lo dio todo en la pista y que, gracias a ello, pudo superar situaciones límite a nivel físico para convertirse en una de las mayores leyendas, no solo de este deporte, sino a nivel universal.
Así lo ve Toni Nadal, el hombre que forjó a la leyenda y que más tiempo estuvo a su lado. En una entrevista a la web oficial de la ATP, el tío y ex entrenador del manacorí analizó la figura de su sobrino y los aspectos que más recordará sobre él, destacando sobre todo su calidad humana para no cambiar nunca pese a todos los éxitos que acumuló en su carrera. Toni confesó que Rafa puede irse tranquilo habiéndose ganado el respeto de millones de personas alrededor del mundo y que lo que más recordará de todos estos años, por encima de los innumerables triunfos sobre la pista, es el proceso que convirtió al balear en uno de los deportistas más grandes de todos los tiempos.
El momento en el que supo su retirada
«Hace unos meses Rafael me comunicó que tenía pensado retirarse. Quería hacerlo en Málaga durante la Copa Davis. Evidentemente, era un tema que más o menos estaba asumido. Sabíamos que tarde o temprano tenía que llegar esta decisión. Hace unos meses que me enteré porque Rafael vino a contármelo«.
Su sobrino, siempre con los pies en la tierra
«La palabra orgulloso no me gusta mucho. Me siento muy contento de todo lo que ha conseguido, dentro de la pista evidentemente por todo lo que ha ganado. Pero, sobre todo, lo que es más destacable y como familiar me satisface mucho, es ver cómo un chico que tuvo la ilusión de llegar a ser un gran jugador de tenis hizo todo lo posible sin perder nunca el norte. Sin dejar de tener nunca los pies en el suelo. Manteniendo siempre la competitividad dentro de los límites de la corrección. Eso evidentemente es lo que me ha alegrado más. Me ha alegrado ver cómo eso se lo ha valorado mucho la gente«.
Se va con el máximo respeto de la gente
«Faltaría más que no se fuera con la cabeza alta. Después de todo lo conseguido, de haber estado muchos años, se ha ganado el respeto de la inmensa mayoría de gente. Ha dejado un buen sabor de boca en todos los torneos en los que participó. Creo que evidentemente se va con la cabeza bien alta«.
Convivir con el dolor
«Claro que le vi sufrir. Pero me acostumbré a verle sufrir en muchas ocasiones durante todo su trayecto tenístico. En muchas ocasiones tuvo lesiones complicadas, lesiones que parecía que le iban a mermar e incluso el disfrutar de poder seguir jugando. Como me acostumbré tanto a eso no me sorprendió verle sufrir un poco al final. La verdad es que incluso viéndole sufrir, creo que Rafael no se puede quejar porque la vida le ha tratado muy bien«.
La naturalidad de comenzar una nueva etapa
«Creo que mi sobrino va a afrontar el día de después con total normalidad. Siempre supo que todo inicio deportivo tiene su fin. No hay carreras deportivas que duren 100 años. De todos modos, creo que estos últimos meses ha ido asimilando este proceso. Evidentemente la retirada es un momento difícil, pero creo que no le será muy difícil enfocar el resto de su vida hacia otras cosas. Creo que se va a dedicar probablemente con el mismo ímpetu con el que afrontó cualquier partido de tenis«.
Los momentos más emotivos a su lado
«Voy a recordar, evidentemente, la final de Wimbledon [2008], las finales de Roland Garros, los torneos de Montecarlo… Pero, sobre todo, creo que voy a recordar el proceso que le llevó a Rafael a alcanzar estas victorias. Le he dicho muchas veces: si no te gusta el proceso, difícilmente te va a gustar el resultado. Siempre di mucho valor al proceso que vivimos. Desde que dejé de entrenar a Rafael, paulatinamente me acuerdo de distintas victorias pero también de entrenamientos en el Club Tenis Manacor, cuando Rafael siendo un niño, intentaba mejorar el drive y el revés«.