KTM rompe el mercado
Por Mauro García Forti
Si hay una estructura que llama la atención a toda la fanaticada esa es la de KTM. La marca austriaca no sólo es la que representa principalmente la oposición contra el gobierno de las Ducati sino que también es la que presenta el plan más ambicioso de toda la categoría.
La RC16 es una moto que no para de progresar, siendo siempre la que más arriesga cuando trae sus mejoras gracias a su tropa de ingenieros traídos directamente de la Fórmula 1, pero en la gestión deportiva de la marca, lo cierto es que la fábrica naranja ha puesto toda la carne en el asador.
Para empezar, la estructura conocida como Gas Gas, que se trata del equipo Tech 3 volverá a cambiar su nombre a KTM Tech 3, pasando a convertirse en una especie de equipo de fábrica, puesto que tanto el equipo oficial, el Red Bull KTM Factory Team, como el que hasta ahora se consideraba el equipo satélite compartirán ingenieros e información, además de que todos llevarán la última versión de la moto, todo esto con el fin de seguir progresando y de experimentar más configuraciones para las carreras.
Pero si esta apuesta no fuera suficiente, la firma dirigida por Stefan Pierer ha ido a por todas en este mercado de pilotos.
Durante este tiempo entre el Gran Premio de Italia y el parón veraniego, el constructor europeo ha reforzado su alineación asegurando la continuidad de Pedro Acosta con ellos con un contrato multianual que lo llevará a ser compañero de Brad Binder en el equipo oficial. El objetivo está claro, el joven español es un diamante en bruto y los austriacos quieren que el “Tiburón de Mazarrón” sea el piloto que los lleve a lo más alto en el futuro.
Con el equipo oficial ya cerrado, faltaba por saber quiénes se serían las caras que representarán al Tech 3 a partir de 2025 y aquí no han pecado de conformistas, porque han fichado a dos campeones mundiales para que piloten las dos motos restantes, Enea Bastianini y Maverick Viñales.
El italiano llega desde Ducati buscando un nuevo reto con una moto totalmente distinta, mientras que el español luego de tres temporadas y media en Aprilia llegará a nueva marca con la que intentará lograr el récord de ganar con cuatro marcas diferentes.
En definitiva, KTM presenta el proyecto más ambicioso de los últimos años en la competición, con el claro objetivo de aplastar la hegemonía de Ducati y conseguir su primer campeonato en la categoría reina del motociclismo. La intención y la motivación están ahí, ahora sólo falta que toda esta energía se convierta en triunfos en la pista.