EL FRACASO FUE NO DEJARLO ANTES
Por Richard Méndez
El nuevo fracaso del Paris Saint-Germain en Champions League vuelve a poner en evidencia la construcción de un club a golpe de la inagotable chequera catarí que paga y pone el capricho del dueño en la cancha. Como fue en los años anteriores los señalados vuelven a ser las estrellas, a veces juntas y otras individualmente. Acusaron de incapaz al mal llamado "mejor tridente de la historia" porque habían juntado a Messi, Mbappé y Neymar. Todos fracasaron como fue antes con Cavani, Lucas, Di María y esa larga lista de luminarias que llegaron a la "Ciudad de la Luz" donde lejos de brillar fueron su versión más oscura.
Todo el que estuvo antes entendió que había que dejarlo antes que sea demasiado tarde, porque no se construyó como equipo y nunca tuvo proyecto serio para sustentarse entre los grandes de Europa. Kyllian Mbappé siempre había tenido la opción que le puso por delante Florentino, llegar a un club grande con mucha historia y las vitrinas que guardan la mayor cantidad de trofeos de la Copa de Europa (hoy Champions League). Pero las fortunas y las promesas de construir un equipo ganador alrededor de su figura le hizo cambiar su desarrollo por la inmensa cuenta de banco y los lujos de alguien que entendió que tarde o temprano sería Balón de Oro.
La dejó pasar no una, ni dos veces, sus desplantes le mostraron incluso arrogante y su realidad se estrelló con lo que ha sido su corto andar en el profesional. Mbappé necesita un torneo mejor y otro perfil de compañeros, un plantel hecho razonablemente y con sentido de pertenencia y crecimiento. Él necesita una institución que sea capaz de dejar un legado y eso no lo tiene el club parisino.
Mbappé puede ser codiciado como futbolista por los mejores equipos del mundo y lo que él ha debido ver es el proyecto de su carrera y no de las cifras bancarias. Se le han ido oportunidades y temporadas en las que no fue capaz de lograr la Champions y ese es el techo del futbolista que juega en Europa y que aspira acumular méritos para ser ganador del Balón de Oro y el premio The Best. No es suficiente jugar en un equipo construido como una colección de barajitas en un álbum de estrellas del fútbol. Para ganar hace falta estar en el lugar indicado y para ello es mejor dejar lo que no te sirve, por eso es probable estará pensando "si tan solo lo hubieras dejado antes".