Cambio de Barajitas en MotoGP
Por Mauro García Forti
Como en cada temporada, los pilotos van y vienen en la categoría de MotoGP, unos se quedan sin moto y buscan un lugar fuera de la categoría, otros se retiran y otros simplemente cambian de equipo.
El final de este año nos ha traído una de las revoluciones de la grilla más grandes de los últimos años, en donde los equipos se han intercambiado los pilotos como si fueran niños intercambiándose las barajitas en el patio del colegio.
De los diez equipos que conforman la categoría, sólo cuatro han mantenido su alineación del año pasado, el equipo oficial de Ducati, donde el campeón del mundo Pecco Bagnaia defenderá de nuevo su título acompañado de “La Bestia” Enea Bastianini. KTM, quienes se mantienen con la pareja de Brad Binder y Jack Miller para continuar con su evolución con destino a ser campeones del mundo y por último Aprilia, quienes se mantienen tanto con Aleix Espargaró y Maverick Viñales en la estructura de fábrica como con Miguel Oliveira y Raúl Fernández en el equipo satélite de la marca de Noale.
A partir de aquí todo cambia, puesto que desde mediados de la temporada ya tuvimos noticias de cambios de pilotos que han sido muy sonados.
El primer fichaje que tuvimos este año fue el de Álex Rins, que dejaba el LCR Honda, equipo satélite de Honda para marcharse al equipo de fábrica de Yamaha. Tras una temporada para olvidar con los japoneses en donde ha estado la mayor parte del tiempo lesionado, el español buscará recuperar su estado de forma con el archirrival de su antigua
marca. Allí le esperará un monstruo como Fabio Quartararo, que precisamente no es una pareja de baile fácil, pues es un piloto muy talentoso, por lo que deberán encontrar el equilibrio para ayudar a mejorar la moto.
El puesto vacío en el LCR Honda lo tomará Johann Zarco, que luego de cuatro años con Ducati dejará el Prima Pramac Racing. El bicampeón mundial ganó este año su primera carrera en la categoría y ahora pasará de tener la mejor moto del paddock a la peor de todas el año pasado, por lo que 2024 será una temporada de mucho trabajo para el francés.
Con la llegada de Rins, Franco Morbidelli se quedaba sin sitio en Yamaha, por lo que el ítalo-brasileño dejó la marca de los diapasones para llegar a la moto que todo piloto desea ahora mismo en la categoría, puesto que llega al Pramac Racing a compartir garaje con Jorge Martín y a manejar la Desmosedici GP24, la última versión de la Ducati.
Y es en el mundo de la marca de Borgo Panigale que más cambios hemos tenido, ya que el fichaje más sonado de los últimos años ha ocurrido en esta marca. El Gresini Racing Team sacudió al mundo con el fichaje de Marc Márquez, que intentará pelear por el mundial con la Ducati de 2023 y quien llega al equipo a compartir garaje con el mejor compañero posible, su hermano menor, Álex Márquez.
El lugar que ocupa el mayor de los Márquez en la formación fundada por Fausto Gresini dejó sin equipo a Fabio Di Giannantonio, que parecía que se despediría del campeonato, pero un final de campeonato espectacular, con victoria incluida al vencer en Catar le dio la oportunidad de ganarse un puesto en el Mooney VR46 Racing Team, donde pilotará una Ducati junto a su compatriota Marco Bezzecchi.
Este último movimiento se debe a que en el equipo de Valentino Rossi quedaba un puesto libre al haberse marchado Luca Marini a Honda para sustituir a Márquez. Ahora Marini trabajará junto a Joan Mir para hacer progresar a la marca japonesa.
Por último, KTM ha decidido apostar por su gran promesa y ha decidido subir a Pedro Acosta, campeón del mundo de Moto2 a la moto del equipo GasGas Tech 3, por lo que el español será el único debutante la próxima temporada. Acosta estará acompañado de Augusto Fernández, quien ya fue compañero en la categoría intermedia en 2022 y que ha demostrado durante el 2023 muchos destellos de talento puro a bordo de la moto satélite de la marca austriaca.
Hay muchísimos cambios para el próximo curso en la categoría reina del motociclismo, cosa que los fanáticos han acogido con muchísima emoción. Hacía tiempo que los fichajes no generaban tanta expectación para la próxima temporada y será muy duro esperar tres meses a que las motos vuelvan a rodar.
2023 ha sido un año sorpresivamente emocionante, del 2024 todavía no sabemos demasiado pero si algo es seguro, es que el espectáculo estará asegurado desde el primer día.