Alpine Implosiona
Por Mauro García Forti
Dentro del paddock de la Fórmula 1. solemos tener dos clases de equipos, los privados, que suelen ser estructuras con una base establecida por el dinero que aporta un dueño o un grupo de inversores para formar el equipo, el cual muchas veces compra piezas de otros equipos como es el caso de Haas y que, por supuesto compra el motor a una de las escuderías del otro tipo, que son los llamados equipos de fábrica debido a que se trata de la división deportiva de un fabricante automotriz, como pueden ser Ferrari o Mercedes.
Normalmente, las formaciones que suelen sufrir problemas en su estructura suelen ser las privadas, por lo que es una sorpresa ver cómo Alpine, una escudería con experiencia en las carreras y ya asentada en la competición se ha estado desmoronando en los últimos tiempos.
La semana pasada se hizo finalmente oficial la salida Laurent Rossi, quien hasta entonces había sido el CEO de la estructura durante las últimas temporadas y quién ha sido señalado como el culpable de la crisis por la que está pasando la escuadra francesa, por el propio Alain Prost, quien fue cesado de su cargo por las conocidas tensiones con Rossi. El tetracampeón mundial declaró hace poco en L’Equipe que la mala gestión de Laurent, a quien describe como un incompetente al que sólo su arrogancia y falta de humanidad superan su falta de liderazgo, ha hecho que los franceses perdiesen el rumbo marcado para lograr podios y victorias.
Por si cambiar al CEO de la estructura no fuese suficiente, este último fin de semana han terminado de rodar las últimas cabezas principales al haberse anunciado en un comunicado oficial las salidas de Otmar Szafnauer, quien era el Director del Equipo desde el inicio de la temporada 2022, Pat Fry, Director Técnico del equipo desde la temporada anterior luego de que se uniese al equipo en 2020 y que se muda a Williams para ser oficialmente miembro de los de Grove a partir de noviembre de este año. Por último, también una cara conocida en Enstone ha sido cesada de su cargo y es que Alan Permane, quien estuvo en los años gloriosos de Renault a mediados de la primera década de este siglo, abandona la fábrica en la que ha trabajado durante treinta y cuatro años.
Estos cambios drásticos llegan ante los últimos fracasos del equipo, entre los que se incluyen la incapacidad para acercarse a las escuderías punteras, quedándose siempre atrapados en la zona media y lo mismo está pasando este año, mientras que rivales directos el año pasado como McLaren y Aston Martin han dado un paso adelante. También ha sido importante para esta decisión el pésimo tratamiento de sus pilotos, que significó la pérdida de un canterano prometedor como Oscar Piastri al habérselo llevado McLaren y de un bicampeón mundial como Fernando Alonso hiciera las maletas y se marchara a Aston Martin, donde Lawrence Stroll lo esperaba con los brazos abiertos.
Luca de Meo, presidente del Grupo Renault no tiene una situación fácil entre manos, ya han habido muchísimos despidos y dimisiones en los últimos años, por lo que será necesario encontrar a un personal que esté capacitado para estabilizar una situación que empieza a írseles de las manos. Según varios portales especializados, Mattia Binotto, ex-Director de Equipo de Ferrari, sería la primera opción para tomar el puesto de Szafnauer.
Por el momento, los sustitutos de los cesados serán Bruno Famin como nuevo Director de Equipo interino, Julian Rouse en el rol de Director Deportivo interino y Matt Haman será el nuevo líder del departamento técnico.
Esperemos que los cambios llevados a cabo ayuden a poner una base sólida para el futuro del proyecto de los galos en Fórmula 1. Al fin y al cabo, la categoría no puede permitirse perder un fabricante tan importante en estos momentos.