NO HAY MOMENTO MALO PARA JUGAR UN CLÁSICO

Por Richard Méndez

Barcelona vive hoy la que es tal vez la época más tormentosa de su historia por la anunciada investigación que lidera la Fiscalía en contra del club azulgrana tras la investigación a quien siendo vicepresidente del Comité de Árbitros recibió la escandalosa cifra de Siete Millones de Euros entre 2001 y 2018. Una situación que ya enloda mucho el prestigio alcanzado por el club en ese lapso y que de cualquier manera termina afectando al futbolista por la incertidumbre que acompaña una investigación de esta magnitud. Para salir de la crisis institucional nada mejor que jugar un clásico ante su eterno rival.

El Clásico de este fin de semana en suelo catalán trae consigo un premio anímico y emocional que hoy es muy necesario para Barcelona. No se trata de un tema de ampliar la ventaja en la tabla de La Liga donde los Culés son líderes con diferencia, en realidad hoy se juega más el tren directivo que ha intentado imponer una campaña de victimización ante el proceso jurídico que se avecina. Desde la presidencia Joan Laporta ha hablado más de conspiraciones que buscan desestabilizar al club que del partido contra el Real Madrid y ganar el domingo sería una forma de imponer un triunfo sobre el victimismo.

Los argumentos futbolísticos del equipo de Xavi se cotizan hoy mucho más cuando toca enfrentar a Real Madrid y no importa que tan fortalecido venga el equipo de Ancelotti, al final siempre Ronald Araujo podría repetir el trabajo para desesperar a Vinicius Junior y Ter Stegen puede volver a ser protagonista en el juego defensivo. Robert Lewandowski tiene la capacidad para dominar la ansiedad y atender otras asignaciones que favorezcan el trabajo en ataque. 

Real Madrid por su lado parece haber puesto ya todos los huevos en la canasta de la Liga de Campeones de Europa y probablemente una derrota en Camp Nou el domingo signifique que se renuncie al campeonato para seguir soñando con la competencia predilecta de Florentino. Seguramente este Barcelona-Real Madrid será electrizante como siempre pero tras los noventa minutos si los merengues son derrotados ya no habrá mayor esfuerzo en Liga.

De cualquier manera el partido de este domingo significa una enorme bocanada de aire para una directiva que hoy se victimiza y le urge distraer a la hinchada y al socio para que no vean el tremendo lío que se viene para la institución. Hoy no existe un mejor momento para salir a jugar el Clásico del Fútbol Español.