La fórmula para que tus zapatillas blancas queden como nuevas
Por Pedro G. Cuesta
A la hora de comprar zapatos o zapatillas, lo habitual es decantarse por el negro, marrón o blanco porque combinan con todo. Pero el problema es que estas últimas se ensucian al más mínimo roce y se nota cualquier pequeña mancha o rastro de suciedad.
De esta manera, limpiar las zapatillas blancas puede resultar de lo más tedioso. Sobre todo, porque hay algunas que no se pueden meter en la lavadora por el tipo de tejido. A continuación, te damos tres formas para lavar a mano las zapatillas y devolverles el blanco de forma económica, casera y rápida:
- Para un caso de emergencia:
Si los zapatos se manchan fuera de casa y hay que limpiarlos con urgencia, una opción rápida, sencilla y barata es comprar una goma de borrar. Simplemente hay que frotar las manchas con la goma hasta que desaparezcan. Este truco es mucho más efectivo en goma que en tela.
- Si el calzado es delicado:
Si se quiere evitar usar productos químicos o usar la lavadora, basta con coger un recipiente y verter en él una cucharada de bicarbonato y una de detergente para la ropa. Entonces hay que remover hasta conseguir una pasta homogénea. Una vez hecha, se frotan las manchas con suavidad con un cepillo de dientes y un poco de la pasta hasta que la suciedad vaya disminuyendo. Finalmente, hay que dejar que se sequen al aire libre.
Si tiene la suciedad incrustada:
De los tres, este es el truco más efectivo. Sin embargo, también es el que más puede perjudicar el zapato. Por esta razón, solo se recomienda este método cuando la mancha está totalmente incrustada. Para este truco solo se necesita un cepillo de dientes y sal gorda de cocina. Primero se utiliza el cepillo para frotar la mancha y que esta se elimine con más facilidad. Una vez eliminado el exceso de la mancha, se cubre con la sal y se deja reposar al menos una hora. A continuación, hay que enjuagarla con agua fría hasta que no queden restos de la sal. Finamente, hay que dejar secar al aire libre.
Hay que tener en cuenta que casi todas las zapatillas de deportes se pueden meter en la lavadora hoy en día. Si bien es cierto que hay que tener una serie de cuidados a la hora de hacerlo, como ponerlas por separado (es decir, no combinar en el mismo lavado ropa y zapatillas, mejor hacer una única colada con zapatillas) y convendría prelavarlas un poco a mano (es decir, frotar con un cepillo suave, como un limpiauñas, y algo de jabón) para que queden lo más perfectas posible.
Foto: Cortesía
Fuente: www.elperiodico.com