Un desarrollador de Gran Turismo 7 tarda cerca de 270 días en crear un coche
Por Gerard Martí
Polyphony Digital, el estudio tras el desarrollo de Gran Turismo 7, invitó el mes pasado a los medios de prensa japoneses a sus oficinas para realizar una visita guiada con motivo de la celebración del 25 aniversario de la popular saga de conducción exclusiva de PlayStation. Paralelamente a la visita, Kazunori Yamauchi, director ejecutivo, concedió diversas entrevistas en las que ofreció detalles interesantes acerca del desarrollo del título, mientras que también habló acerca de las expectativas de los fans y del catálogo de coches disponible.
Durante una de las entrevistas, Yamauchi comentó que cree que existe una brecha entre lo que él imagina para los juegos y lo que de verdad quieren los fans, aunque sostuvo que dicha brecha es "saludable" poniendo como ejemplo el caso de Gran Turismo Sport, un título experimental que recibió comentarios muy divididos por parte de la comunidad, aunque en su opinión ayudó a allanar el camino para Gran Turismo 7.
Por otro lado, el directivo abordó otra cuestión que preocupa enormemente a algunos jugadores: el regreso de ciertos coches al juego. Yamauchi afirma que no son pocas las ocasiones en las que recibe numerosas peticiones de usuarios que exigen que vehículos como el Toyota Chaser o el Mitsubishi Lancer Evolution 4 vuelvan al juego. Sin embargo, insiste en que los jugadores deben entender que los recursos de Polyphony Digital son algo limitados y que el tiempo necesario para que un desarrollador pueda crear un coche en el título desde cero puede llegar a ser de hasta 270 días. Además, añadió que el ritmo actual de creación de vehículos es de unos 60 coches nuevos al año, pero que el ritmo de creación en Gran Turismo 7 no se ve reflejado en este dato, ya que el juego ha recibido poco más de 30 coches nuevos desde que llegó al mercado.
Nuestra opinión sobre Gran Turismo 7
"Gran Turismo 7 es imperfecto y tiene detalles en los que puede mejorar, con un modo Café que peca de ser demasiado simple, unas colisiones que siguen necesitando evolucionar y daños apenas perceptibles en los vehículos, aunque todo eso pasa a un segundo plano cuando agarramos un DualSense y nos ponemos a jugar con una conducción muy pareja a la real, disfrutando de las sensaciones del mando en nuestras manos que nos transportan al videojuego, del gran acabado visual, de los matices del sonido del turbo o del motor que cambian de coche a coche y de la gran y satisfactoria sensación de conducción que nos arranca una sonrisa y nos permite divertirnos como nunca con un coche dentro de una pista virtual", concluimos en nuestro completo análisis sobre el juego.
Fuente: www.vandal.elespanol.com