Mercedes no espera a las uvas
Por Mauro García Forti
A falta de todavía más de dos meses para que la temporada 2023 de Fórmula 1 arranque en Baréin el 5 de marzo, las escuderías terminan de llevar a cabo los preparativos para la próxima temporada. Sin embargo, parece que Mercedes se ha adelantado a sus rivales este año.
Si hay un ritual en la pretemporada que es muy esperado por los aficionados del deporte, ese es el primer arrancado del motor ya instalado en el nuevo monoplaza. Normalmente esta prueba se hace en el mes de enero, pero los alemanes no han querido esperar al nuevo año para despertar a su nueva bestia.
La nueva arma ha sido bautizada como W14, siguiendo así la saga de las flechas plateadas desde que volviesen a la categoría en 2010. Se trata de la evolución de un W13 que parecía innovador, pero que acabó trayendo muchísimos problemas desde su nacimiento y terminó con la racha de ocho años seguidos ganando el Campeonato de Constructores.
No obstante, el equipo mira hacia el futuro con mucho optimismo luego de que terminasen el año con resultados muy positivos tras haber sacrificado buena parte de la temporada para solucionar las carencias de su máquina, casi atrapando el segundo lugar de Ferrari en el campeonato en las carreras finales.
A la escudería de la marca de la estrella no le gusta perder, y mucho menos contra Red Bull, su mayor rival en los últimos años en todos los ámbitos. Ver a los austriacos arrasar en 2022 no debe de haber sido muy sencillo de digerir para los hombres de Toto Wolff. Como prueba de esto tenemos las declaraciones a la prensa de Lewis Hamilton y George Russell, en donde el término “2023” no para de repetirse.
Quieren ganar y cada uno de los miembros del personal de las fábricas de Brackley y Brixworth llevan trabajando durante casi un año para devolver la corona y el dominio de la Fórmula 1 a la casa germana.
No sabemos todavía cuando se presentará este nuevo W14, pero el mensaje a los rivales es claro, Mercedes ya está preparada para la guerra.