Audi Q8 e-tron: mejorando lo presente
Por Carlos De Miguel
Audi es una de las marcas que, desde 2018, más está trabajando y con mejores resultados, en la electrificación de su gama. Ha comenzado aplicando esta tecnología en los modelos del segmento más alto, como es el caso de los e-tron que, tras cuatro años en el mercado con ventas de más de ciento cincuenta mil unidades, han sido renovados y estarán disponibles a finales del próximo febrero. Un automóvil amplio, impresionante de formas, con dos carrocerías, SUV y Sportback, y con dos niveles de potencia y autonomía.
La carrocería mantiene las grandes dimensiones que siempre han caracterizado a esta familia dentro de la gama de la marca de los cuatro aros. Son casi cinco metros de largo, 4,91 exactamente, por 1,9 de ancho y 1,6 de alto. Y su gran distancia entre ejes, de 2,9 metros, le proporciona una gran habitabilidad interior de manera que pueden viajar cinco adultos sin ningún tipo de apreturas y con generosos equipajes, ya que su maletero permite una carga de 569 litros, además de otro compartimento de 62 litros que encontramos bajo el capó delantero.
En su estética, los cambios más significativos se han producido en la zona frontal, donde destaca la gran parrilla metálica con la insignia de los cuatro aros destacando en la parte más elevada, escoltada por los estilizados faros de última tecnología “matrix leed” que ofrecen una destacada luminosidad en la oscuridad. Bajo los faros, dos entradas de aire de grandes dimensiones refrigeran frenos y otros elementos. En general, la elegancia preside el diseño de este automóvil que, a la vez, puede ser un coche de familia o de representación, sobre todo en la muy acertada carrocería Sportback que ha logrado un bajo coeficiente de penetración aerodinámica, de hasta solo 0,24, lo que contribuye a una mayor autonomía de sus baterías.
El interior responde a lo que todos esperamos de un Audi de lujo, ya que combina a la perfección la calidad de los materiales, de origen reciclado, con un diseño sobrio y elegante, pero con elementos como el techo practicable. No detallaremos el equipamiento y la conectividad ya que, como es de suponer, se encuentran en el nivel más alto de lo que la tecnología actual puede ofrecer. Un detalle de avance de sistemas se evidencia, por ejemplo, en los espejos retrovisores. Han sido sustituidos por cámaras que ofrecen la imagen en pantallas situadas en la parte delantera de la puerta. Cuesta acostumbrarse a la situación, pero la imagen es nítida y pueden resultar más eficaces en casos de mal tiempo. En carretera este Audi resulta divertido y manejable, a pesar de sus dimensiones. Su chasis permite una conducción suave y silenciosa, que puede convertirse en deportiva gracias a sus fulgurantes aceleraciones y la estabilidad de su chasis y el trabajo que se ha hecho en las suspensiones. Su velocidad punta está limitada a 200 km/h.
Dispone de unos 40 sistemas de asistencia al conductor. Hasta cinco sensores de radar, cinco cámaras y doce sensores de ultrasonidos proporcionan información del entorno, que es analizada por la unidad central de control. Merece un capítulo aparte el asistente de aparcamiento remoto gracias al cual se puede controlar la maniobra de aparcamiento a través de una aplicación desde el smartphone. Cuando el vehículo alcanza su posición definitiva en la plaza de aparcamiento, se apaga automáticamente, acciona el freno de estacionamiento y bloquea las puertas. Para salir de la plaza, el motor se enciende a través del móvil y el vehículo maniobra lo suficiente hasta permitir un cómodo acceso al interior.
Desde el punto de vista mecánico, el Q8 e-tron presenta tracción a las cuatro ruedas permanente gracias a la acción de sus dos motores eléctricos, uno en cada eje. Los compradores tienen a su disposición dos alternativas, bautizadas con los números 50 y 55, y que se diferencian por el nivel de potencia y por la capacidad de sus baterías, que repercute lógicamente en su autonomía. El 50 tiene 340 caballos, frente a los 408 del 55. Y la autonomía puede ser de entre 501 a 595 kilómetros en función de la carrocería y la potencia elegidas. Audi ha mejorado el apartado de las baterías reduciendo los tiempos de recarga gracias a que admiten cargadores de potencias de hasta 170kw, con lo que en media hora se recupera toda la capacidad energética. Si utilizamos un wallbox de casa, el tiempo se incrementa hasta las nueve horas.
Como hemos apuntado, ya se pueden realizar pedidos de este nuevo modelo, en sus diferentes terminaciones, cuyas primeras entregas llegarán en el plazo de un par de meses aproximadamente. Los precios son de ochenta y cuatro mil euros en el caso del 50, y diez mil más en la versión 55. Se anuncia para más adelante una versión más deportiva, SQ8, que estará equipado con tres motores, dos traseros de 133cv. cada uno y uno delantero de 169cv., con autonomía de 465 kilómetros.
Foto: Audi
Fuente: www.larazon.es
