EL BAILE DE JOSH NAYLOR
Por Nelson Muñoz
@nelsonrafael013
Llegaba el cuarto encuentro de la Serie de División de la Liga Americana en Cleveland y el bateador de los Guardianes, Josh Naylor le pegaba un jonrón solitario a Gerrit Cole, que los acercaba al marcador 3×2. Tal batazo recibió un baile donde Naylor simulaba que cargaba a un bebé, situación que incomodó mucho a los fanáticos e incluso jugadores de Nueva York.
Muchos tomaron esa burla como que Naylor les decía: ¿quién es tu papi?
Al final de ese choque, fueron los Mulos quienes se impusieron 4×2 y forzaron el quinto. Las expectativas crecían ante la mofa o celebración de Naylor, como lo quieran ver, muchos creían que un pelotazo al toletero estaba cantado, pero no era el momento, quizás embasar a un hombre sin necesidad en un juego decisivo, quedaría aparte.
Llegó el quinto y nada de eso ocurrió, pasaron los nueve capítulos, los Yanquis hicieron cinco con jonrones de Giancarlo Stanton, Aaron Judge y una excelente labor de Néstor Cortés desde la lomita.
Con dos outs en la pizarra que favorecía a Nueva York 5×1 y hombre en primera, el bateador de turno conecta un rolling al campocorto que culminó en el guante del segunda base, Gleyber Torres, forzando el out 27 para eliminar a Cleveland en el quinto y decisivo y
que terminó con la misma mofa por parte del venezolano hacia los Guardianes, cobrando venganza de lo ocurrido en el cuarto juego.
Incluso las esposas de los jugadores de los Yanquis, hicieron el baile del bebé en redes sociales, luego que los Yanquis consiguieron la clasificación.
Se sigue hablando de si es una celebración o una burla, al final cada quien tendrá su opinión y eso es la libertad de expresión, siempre y cuando no caigas en la falta de respeto. Pero desde mi punto de vista, lo que muchos llaman “el perreo”, se ha convertido en una especie de rivalidad directa de jugador a jugador, donde el que gana la batalla lo reta de forma burlesca y directa.
Hay formas de celebrar, sin señalar, donde no podemos negar que uno como ser humano, y ante tal celebración de ganar una batalla lo festejes, pero no humillando.
Varios ejemplos deportivos y de celebraciones, los goles de Bebeto en el Mundial de Fútbol USA 94, quien celebraba con su equipo y viendo a sus seguidores el gol y adicionalmente el nacimiento de su hijo ¿lo recuerdan? Algo respetuoso.
Una no tan respetuosa y de fútbol fue la de Yerri Mina con la selección de Colombia en los penales frente a Uruguay en la pasada Copa América, mandando a callar al portero, totalmente fuera de contexto y donde hay irrespeto hacia el rival.
Y en el béisbol venezolano, muy famoso fue el duelo del lanzador Máximo Nelson con su celebración hacia el oponente del avión que hacía, hasta que Balbino Fuenmayor le sonó un bambinazo en Puerto la Cruz, inmenso y se lo devolvió, con una flecha al pisar el home. Sin embargo eso pasó a un lado y ambos al final se reían de la situación y eso también es parte del juego.
La celebración siempre estará a la orden del día, pero también está a la orden día el respeto hacia el oponente, hacia ese que está batallando de tú a tú contra ti, y que lo está dando el todo por el todo… un dicho que nunca falla es “respeta para que te respeten”.
