A un paso de la gloria
Por Alejando Skale/ Álex Biescas
Llegó el gran día. Ese que la mayoría de los equipos de la categoría soñaron disputar: luchar por el ascenso. Tras una larga temporada, Tenerife y Girona lo han conseguido, pero solo podrá subir uno. Lo decidirán en un Heliodoro a reventar donde a los blanquiazules les vale el empate tras el 0-0 de la ida y por haber acabado por encima de su rival en la fase regular. Pero nadie quiere confiarse.
En el año de su Centenario, los tinerfeños buscan sacarse la espina clavada desde el 2017 cuando perdieron la final por el ascenso en Getafe con Dani, Aitor y Carlos Ruiz como únicos supervivientes de aquella triste noche. Los catalanes, por su parte, han llegado a las últimas dos instancias decisivas perdiendo ambas (ante Elche y Rayo Vallecano) y esperan que a la tercera sea la vencida.
Ha sido una semana de sensaciones encontradas. La confianza por conseguir el objetivo se respira en ambas instituciones, sabiendo que en 90 o 120 minutos se define el futuro tanto deportivo como económico. Hay mucho en juego, pero a la hora del pitazo de Arcediano Monescillo, lo importante será saber aplicar todo lo bueno que hizo a los dos llegar hasta aquí. Los nervios, siempre traicioneros, también harán de las suyas.
Luis Miguel Ramis no pretende hacer demasiados cambios en su once. El plan de Montilivi funcionó ya que se supo defender al Girona y se acabó con la portería a cero. Tendrá que ver también el cansancio acumulado en las piernas de los futbolistas para decidir alguna permuta, pero es probable que el míster repita alineación. Eso sí, en esta ocasión deberá mejorar la faceta ofensiva porque en la ida apenas inquietaron la meta rival.
En Girona, las tres palabras que más han sonado estos días previos han sido ilusión, responsabilidad e historia. Ilusión lógica, por estar a un paso de Primera, responsabilidad toda, son conscientes de que tienen una ciudad detrás, e historia mucha: esta será la tercera final consecutiva del playoff que juega. En las dos anteriores no solo perdió, sino que vio como le remontaban en casa un resultado favorable de la ida. Exactamente lo contrario de lo que esperan que pase hoy. Jugando fuera de casa, con un resultado de partida que no les vale, esperan trasladar toda la presión al Tenerife.
La alineación de Míchel es, más que nunca, una incógnita. No solo porque se haya llevado 27 futbolistas, sino porque tiene muchas variantes. Perfectamente podrían entrar en el once Iván Martín, Valery o Bustos, así como manejar otro entramado defensivo. La opción de jugar con dos centrales es perfectamente viable, como también lo es la de tres. Sea como sea lo que no cambiará es la idea y la idiosincrasia de este equipo. Es lo que les ha llevado hasta aquí.
Claves
Tranquilidad
El Tenerife jugará con cierta tranquilidad porque le vale el empate, pero nadie quiere relajaciones ni sustos.
Acierto
No hay otra, el Girona necesita al menos un gol para estar en Primera la temporada que viene. Con Stuani en su bando todo es más sencillo, pero el Tenerife se defendió perfectamente en la ida.
Ofensiva
Los de Ramis deberán estar más finos en ataque ya que en la ida les costó mucho llegar a las inmediaciones de Juan Carlos, al que apenas inquietaron.
Unión
27 jugadores han viajado a la isla, toda la plantilla menos los lesionados además de los jugadores del filial que han participado esta temporada. Creen a ciegas en su técnico y su idea.
As a seguir
Soriano
Por sus manos pasarán muchas de las opciones del Tenerife. Además, enfrente tendrá al goleador de la categoría.
Álex Baena
Quizás la sorpresa del curso, uno de los jugadores más desequilibrantes de la competición y que tiene la difícil misión de poner patas arriba la ordenada defensa del Tenerife.
Altas y bajas
Ramis solo tiene las bajas de Pablo Larrea y Javi Alonso, lesionados. Recupera a Sipcic tras jugar con selección.
Las únicas bajas de Míchel son Kébé y Sarmiento lesionados. Borja García tiene muy complicado participar en el partido, llega muy justo tras su lesión.
Foto: Diario AS
Fuente: www.as.com
