POR LOS CAMINOS VERDES NO
Por Richard Méndez
La FIFA desestimó la denuncia hecha por la Federación de Fútbol de Chile contra Ecuador, reclamando los puntos por una "supuesta" alineación indebida de Byron Castillo en la que los australes alegaban que el jugador sería colombiano. La intención de reclamar la totalidad de los puntos le agregaría cinco unidades en la clasificatoria mundialista alcanzando la cifra de 24 puntos, dejando a Ecuador fuera y metiéndose directamente en el Mundial. Ir por los caminos verdes para lograr lo que en la cancha no fueron capaces, ya que la Roja terminó en séptimo lugar apenas por encima de Paraguay, Bolivia y Venezuela. Hace cuatro años hubo una denuncia que resultó favorable a Chile que junto a Perú reclamaron la alineación indebida de Nelson Cabrera en la Selección de Bolivia, aquella vez le quitaron los puntos a los del altiplano y se los acreditaron a chilenos y peruanos. La maniobra en los escritorios fue curiosamente lo que hizo que Perú finalizara en quinto puesto desplazando a Chile que se quedó fuera de la clasificación.
Esta vez solo ellos denunciaron a Ecuador y se encargaron de recolectar pruebas del nacimiento de Castillo en Colombia, una investigación que en realidad compete a las autoridades ecuatorianas que son las que otorgaron la nacionalidad ecuatoriana al jugador y ante esto FIFA puede hacer poco o nada. Probablemente si los ecuatorianos descubrieran que Castillo obtuvo la nacionalidad de forma fraudulenta eso podría llevar a una acción de las autoridades de identificación del país y entonces FIFA podría fallar en favor de Chile, pero eso no está siquiera planteado.
Pablo Milad, presidente de la federación chilena anunció que van a apelar la decisión del comité disciplinario de FIFA y en caso que no se pueda revertir la situación considera acudir al TAS para intentar encontrar la vía que lleve a Chile de regreso a la Copa del Mundo. Tales intenciones han sembrado la rabia y hasta vergüenza que manifiestan los fanáticos chilenos interpretando la acción federativa como populismo ante el fracaso por segunda ocasión en el intento de llegar al Mundial.
Escribiendo estas líneas vino a mi mente el lamentable episodio en Copa América de 2015 cuando Gonzalo Jara hizo el famoso "dedazo" a Cavani que llevó a la injusta expulsión del atacante celeste, Chile venció por 1-0 y avanzó a semifinales, a Jara lo suspendieron pero Chile siguió adelante hasta vencer a Argentina en la final. Obviamente hubo una situación la cual sirvió a la Roja para derrotar al campeón defensor al que dejaron en inferioridad numérica. Nadie pensó siquiera en denunciar que Chile no podía obtener el título porque lo ganó en la cancha.
La eliminatoria mundialista de Conmebol es un largo transitar de dieciocho jornadas para lograr clasificarse, algunas veces se juega contra la altura, otras contra el húmedo calor y en ocasiones contra el peso de la historia de otras camisetas. En el fútbol se gana, se empata o se pierde pero siempre respetando esa letra no escrita pero que todos conocemos y llamamos "códigos" , los mismos que nos dicen que la dignidad del fútbol está en ganar sin hacer trampas en la cancha y no en los escritorios. El fútbol es un juego de noventa minutos que enfrenta a dos equipos donde gana el que la meta más veces en el arco contrario y no acudiendo por los caminos verdes.